La droga asegurada está relacionada con mil 175 expedientes, entre averiguaciones previas, carpetas de investigación y causas penales.
La Fiscalía General de la República en coordinación con elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional, incineró más de 60 toneladas de narcóticos, durante 21 eventos que se llevaron a cabo en igual número de estados.
La droga asegurada está relacionada con mil 175 expedientes, entre averiguaciones previas, carpetas de investigación y causas penales.
De acuerdo con la FGR, lo incinerado incluyó 53 mil 891 kilos de marihuana, mil 276 kilos de cocaína, 44 kilos de heroína, 5 mil 531 kilos de metanfetamina, 57 kilos de goma de opio, así como más de 118 mil pastillas psicotrópicas. Los eventos se realizaron en Baja California, Tamaulipas, Sonora, Jalisco, Zacatecas, Sinaloa, Chihuahua, Baja California Sur, Estado de México, Nuevo León, Nayarit, Michoacán, Quintana Roo, Querétaro, Guerrero, San Luis Potosí, Puebla, Aguascalientes, Colima, Oaxaca y Chiapas.
Baja California es la entidad que incineró más narcóticos, con 27 mil 710 kilos, seguido por Tamaulipas con 5 mil 906 y Sonora con 5 mil 360, así como Jalisco con 4 mil 23 kilogramos. Las incineraciones contaron con la asistencia de autoridades de la FGR así como de la Sedena, además del Órgano Interno de Control de la fiscalía, quienes supervisaron que el proceso se llevara a cabo en términos de la normatividad aplicable en la materia.
Incineran 27 toneladas de drogas en Baja California Más de 27 toneladas en drogas fueron destruidas por el método de incineración en las instalaciones del 28 Batallón de Infantería de la II Zona Militar y por lo histórico los agentes federales aprovecharon para tomarse la fotografía del recuerdo.
El principal estupefaciente incautado por las autoridades es marihuana, seguido por metanfetaminas, heroína y otros sicotrópicos, describió Victoriano Porcayo Domínguez, delegado de la PGR en Baja California. Mencionó que se trata de decomisos realizados por las autoridades de los tres niveles de gobierno en cumplimiento con la instrucción de decomisar drogas para evitar lleguen a las calles.
La incineración es histórica porque después de más de una década se destruye una alta cantidad de drogas, expuso. El año pasado, dijo, tuvieron una quema de estupefacientes con apenas 11 toneladas, superada por más del doble con este evento.
Fuente: Milenio
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