Antes de comenzar el éxodo de mil 500 pobladores, se reportó robo de vehículos y herramientas de uso agrícola por parte de los grupos criminales.
Habitantes de al menos 13 comunidades serranas del municipio de Jerez en Zacatecas, víctimas de la violencia del narco, se desplazan a lugares seguros en zonas urbanas del estado.
En Ermita de los Correa, los habitantes cuentan que en menos de un año se convirtió en una zona de guerra; enfrentamientos con armas de alto calibre aterrorizaron al pueblo.
“Y ahora que pasó esto de que llegaron estas gentes, hasta de día tiene uno miedo. Las balaceras ya estaban por todos los callejones”, narró una de las víctimas colaterales que se preparaba para abandonar la comunidad.
Los habitantes de Ermita de los Correa fueron amenazados, se registraron desapariciones de personas y otros fueron obligados a reclutarse para trabajar con los cárteles criminales.
Ante la amenaza de la delincuencia, comenzaron el éxodo y abandonaron sus tierras, viviendas, negocios y ganado. Antes, los criminales los despojaron de vehículos y herramientas para el trabajo agrícola.
El ejército mexicano envió un destacamento que permanecerá en Jerez permanentemente, hasta el momento el ejército a liberadado a personas secuestradas y decomisado un vehículo del crimen organizado, algunos habitantes regresaron con la llegada del ejército a la comunidad y otros regresan para llevarse sus pertenencias y dejar abandonos sus hogares.
“Mientras esté el ejército en la comunidad me siento seguro pero cuando ya no estén esté será lugar sin ley, ahorita aprovecho para llevarme mis cosas y animales a la ciudad”. Fue las palabras de un habitante de Jerez.
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