Orson Iván Gastelúm Cruz el Cholo Vago, quien durante años ganó notoriedad por mantener un cerco de seguridad en Guamúchil para que grupos adversarios al Cártel de Sinaloa
No entraran a Culiacán, no enfrenta cargos por narcotráfico en Estados Unidos, por lo que no existen documentos que muestren que, eventualmente, vaya a ser extraditado a ese país.
Según una serie de expedientes del Departamento de Justicia de Estados Unidos (USDOJ), el Cholo Vago era principalmente jefe de sicarios del Cártel de Sinaloa, particularmente designado a la fracción que comandaba Joaquín el Chapo Guzmán.
Y su participación por tráfico de droga no era conocida por nadie, lo que hacía que el gobierno del vecino país del norte no se interesara en él. Incluso, no aparecía en la lista de los más buscados que cada mes pública la DEA, y si la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y la Marina andaban tras él, era porque le había dado por enfrentar soldados y emboscarlos cada vez que podía, pues “no los quería”.
“Dice gente de El Pozo, que era donde operaba últimamente, que cada vez que (el Cholo Vago) se enteraba que soldados andaban patrullando cerca de sus terrenos, iba y los enfrentaba porque les tenía mucha tirria por la muerte de una novia que tuvo allá pa’lado de Guamúchil”, comentó Baldomar Cázares, el Líder, un cantante de corridos originario de Badiraguato, quien alguna vez tocó para gente cercana al Cholo Vago.
Sin embargo, según señalaron abogados de Estados Unidos, el hecho de que no sea identificado públicamente, no quiere decir que no esté ubicado por el USDOJ, sino que tal vez haya otros expedientes que se mantengan clasificados, y que en cualquier momento le pueden presentar cargos.
Michael Kramer, abogado criminal en la ciudad de Nueva York, explicó que un caso puede estar sellado, y nadie saber lo que está pasando, porque se están reuniendo evidencias para acusar a una persona, y muchas veces los fiscales no desean que se ventile un caso.
“Pero eso no quiere decir que no vaya a tener cargos en su contra”, observó Kramer a Ríodoce.
El camino de la sangre
El Cholo Ivan, o Cholo Vago, fue reclutado para unirse a las fuerzas de seguridad que peleaban la plaza en Tamaulipas a los Zetas, en 2004 y 2005. Quienes entonces lo conocieron aseguran que era un tipo de arranque, y era decidido y temerario.
Ese arrojo lo integró a las fuerzas que protegían a Joaquín el Chapo Guzmán, en Culiacán, pero fue a mediados de 2006 que elementos castrenses al mando del general Sergio Aponte Polito, lo detuvieron junto con otros ocho pistoleros durante un operativo en la colonia Lombardo Toledano
Sumergido entre las sombras, el Cholo Iván mantuvo un bajo perfil, hasta que en 2009, un grupo de sicarios asaltó y asesinó sangre fría a su padre, en una comunidad de Mocorito, por lo que Gastelum Cruz se fugó para buscar a los responsables, y vengarse.
La fuga y la venganza le ganaron notoriedad ante el Chapo Guzmán, quien lo asignó a la zona de Guamúchil para detener a las células del Chapo Isidro, que estaban entrando por la zona norte del estado.
Según gente relacionada con la guerra desatada en aquel entonces, el Cholo Vago formó un cerco de seguridad que involucraba a la policía municipal y del estado, con rondines nocturnos, retenes falsos, rastreo de llamadas, halcones, y gente infiltrada que le informaba hasta cuando se movían las hojas de los árboles.
Pocos años después, y tras al menos 15 narcocorridos en su honor, una fama que alcanzaba a rebasar fronteras, el 11 de julio de 2015, el Chapo Guzmán se fugó de la cárcel del Altiplano, y el Cholo Vago fue designado como el jefe de seguridad para proteger y mover al Chapo Guzmán por el estado, y alejarlo de la Marina, que entonces le seguía los pasos muy de cerca.
De vuelta a las sombras
Poco le habría de durar el gusto al Cholo Vago, pues cuando arrestaron al Chapo, él también fue aprehendido. Actualmente se encuentra recluido en el penal del Altiplano, en el Estado de México.
Aunque en apariencia no enfrenta cargos estadunidenses, armas de Rápido y Furioso han sido encontradas dos veces en enfrentamientos donde él ha estado involucrado; la primera de ellas en 2012, durante un enfrentamiento en Mocorito, donde murió la ex reina de belleza Susana Flores, y la segunda vez durante el arresto del Chapo, el 8 de enero, en Los Mochis, Sinaloa