Los fines de semana no defraudan en México, son los días donde se suman tantos muertos que elevan el promedio diario a casi las 100 víctimas de la violencia que sacude el país. La Fiscalía de Zacatecas ha informado del hallazgo de ocho cuerpos sin vida tras un enfrentamiento armado en la comunidad Emiliano Zapata, perteneciente al municipio de Villanueva. Se trata, informan los medios locales, de una balacera entre dos grupos rurales de la que no se han hecho públicas las razones aún. Se ha identificado a uno de los cadáveres que ya ha sido entregado a la familia y se continúa con las tareas forenses para dar con la identidad del resto. Todos ellos son hombres.
Zacatecas es uno de los Estados más castigados por la violencia de los carteles que se disputan el territorio y por enfrentamientos entre ellos que día con día dejan un reguero de muertes. Su estratégica situación camino al norte le convierte en campo minado. Mientras se recogían estos cuerpos, los medios informaban también del hallazgo en el municipio de Luis Moya de fosas con 10 cadáveres en distintos estados de descomposición, lo que indica que era un lugar recurrente para hacer desaparecer los cuerpos. Son miles los que buscan los familiares en este Estado.
Pero las 100 víctimas diarias se reparten por todo México, incluso en el corazón de la capital, donde este sábado se ha reportado también una víctima mortal, de 21 años, baleada en el deportivo Maracaná, en Tepito, al que llaman barrio Bravo por razones obvias. Entre los heridos hay uno de 16 años, otro veinteañero y un hombre de 57 años. Cuatro individuos armados entraron al centro deportivo, descargaron sus armas de inmediato y huyeron después en dos motos.
Las drogas suelen andar detrás de estos asesinatos, como dejan entrever ya algunos de los mensajes en las redes sociales de quienes conocían al muerto. El cartel Tepito gobierna con mano de hierro en esta zona deprimida del centro de la capital donde se financia con el narcotráfico y el cobro del piso a los miles de comerciantes que se desempeñan en la zona. Pero no es el único grupo criminal que opera en estos predios.
La violencia criminal se ha dejado sentir con fuerza por todo México en las últimas semanas, donde se han contado centenares de cadáveres sin que las vacaciones navideñas hayan supuesto una tregua. El país pierde miles de jóvenes envueltos en negocios oscuros ligados con el crimen organizado que afecta cada vez a más ámbitos de la vida diaria y de los rubros económicos.
La alta criminalidad a la que nadie puede poner fin salta con frecuencia a la política, máxime en tiempos electorales, como los que ahora atraviesa al país, que también aportan su dosis de violencia cuando son los propios candidatos los asesinados, en buena medida por parte de grupos que quieren también su tajada en los comicios municipales.
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