Tijuana, B.C.- Una mujer fue asesinada a balazos al interior del Hospital General de Tijuana (HGT), en un ataque directo perpetrado por sujetos que ingresaron al área de Urgencias presuntamente vestidos como personal médico.
De acuerdo con la Agencia Estatal de Investigación, los hechos ocurrieron alrededor de las 18:20 horas de este martes, cuando se recibió el reporte de una mujer lesionada por proyectil de arma de fuego en el área hospitalaria. Al arribar al lugar, los agentes confirmaron el deceso de la víctima, una mujer de aproximadamente 40 años.
Testigos indicaron que, en el momento del ataque, la víctima se encontraba en el área de urgencias cuando fue agredida por dos sujetos armados que burlaron la seguridad del nosocomio. El atentado desató una intensa movilización policiaca en la zona, obligando a la presencia de diversas corporaciones para resguardar las instalaciones del hospital.
Horas antes, según versiones oficiales, uno de los atacantes —un hombre delgado, de cabello rizado y vestimenta oscura— ya había intentado ingresar al hospital. A las 10:00 de la mañana, el sujeto fue visto en el área de acceso, donde accidentalmente dejó caer un arma de fuego. Aunque recogió el arma y huyó rápidamente del lugar, logró regresar por la tarde para concretar el ataque.
El informe de las autoridades detalla que la víctima había sido agredida con arma de fuego en la colonia Ignacio Ramírez, en la Delegación San Antonio de los Buenos, específicamente en las calles Guillermo Prieto y Eucalipto. Fue trasladada por una unidad del sector al Hospital General para recibir atención médica, donde finalmente fue rematada.
Tras el homicidio, se desplegó un operativo de búsqueda en la zona, sin que hasta el momento se haya logrado la detención de los responsables. La Fiscalía General del Estado ha iniciado las investigaciones correspondientes.
El personal médico, de enfermería y trabajadores del hospital están siendo entrevistados por las autoridades ministeriales. También se revisan los protocolos internos de seguridad del hospital, cuya vulnerabilidad quedó expuesta con este hecho.
Este nuevo episodio de violencia refleja la gravedad de la inseguridad en Tijuana, donde ni los espacios de atención médica logran mantenerse al margen del crimen organizado.
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