Familiares y amigos de los oficiales caídos en el motín de Ciudad Juárez pidieron justicia a la gobernadora Maru Campos, quien dijo que no habrá impunidad.
Familiares, amigos y autoridades de los tres niveles, rindieron tributo a los 12 policías estatales muertos durante el motín y fuga de 30 reclusos del Centro de Reinserción Social (Cereso) tres de Ciudad Juárez, ocurrido la mañana de este domingo 1 de enero.
La ceremonia se hizo al pie del asta bandera monumental que se ubica en el parque El Chamizal, a unos metros de la frontera con Estados Unidos.
Los cuerpos de los elementos llegaron al lugar entre exigencias de justicia por parte de sus familias y amigos cercanos, tras un largo recorrido del cortejo fúnebre, que fue escoltado en todo momento por varias decenas de unidades policiales, por las avenidas de la ciudad fronteriza.
En las inmediaciones del histórico parque, fueron colocados los féretros de los policías Carlos Santiago Padilla, Domingo Trejo, Manuel Rodríguez Soria, Guadalupe Gámez Galán, Jaime Arciniega Alvarado, Edgar Omar Hernández, Carlos Ernesto Salinas, Abel Juárez Hernández, Víctor Rivera Meraz, José Ausencio Pérez, Edgar Ramírez y de Omar Eduardo Posada.
Un contingente de agentes ministeriales disparó las salvas de honor, y mientras se hacía el toque de silencio por la banda de guerra de la corporación, se colocó a media asta la bandera nacional como símbolo de luto.
Durante la ceremonia, la gobernadora Maru Campos dijo a las familias de los fallecidos, que lo sucedido no quedará impune, por lo que toda la fuerza del Estado trabaja para encontrar a los responsables del motín en Ciudad Juárez.
Les garantizó además que su gobierno les brindará acompañamiento en todo momento, para que puedan salir adelante.
Más tarde, la mandataria dio a conocer que ya se tienen avances importantes en las investigaciones sobre lo sucedido en el penal, por lo que en breve habrá resultados.
Agregó que su gobierno no bajará los brazos, pues hay la convicción de rendirse ante los obstáculos que haya: “haré lo necesario por reivindicar esta situación que se dado”.
Recordó que el año pasado Ciudad Juárez tuvo una disminución del 25 por ciento en los índices delictivos, particularmente de homicidio doloso.
“Veníamos controlando la situación en Ciudad Juárez; eran las bajas más pronunciadas en los últimos cinco años, no habíamos tenido una baja como la tuvimos en 2022, controlando la situación hasta que esta tragedia ocurrió”, finalizó.
El domingo, al irrumpir un comando armado en las instalaciones del Cereso, se registró un enfrentamiento en su interior con saldo de 10 custodios y siete internos sin vida, así como otros 14 lesionados y la fuga de 30 reclusos.
Al día siguiente, como parte de los operativos que las distintas corporaciones realizaron en la ciudad, hubo un enfrentamiento en el que murieron otros dos policías ministeriales y cinco presuntos delincuentes.
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