La inseguridad ocasionada por grupos de la delincuencia organizada en diferentes estados es uno de los principales retos que se enfrentarán este 2022. Sin embargo, cada entidad afronta características y formas diferentes de violencia.
Por lo pronto, se esperan resultados en las entidades donde se implementó el plan de seguridad (Guerrero, Michoacán y Zacatecas) para paliar los altos niveles de violencia y en los cuales recientemente entraron en funciones gobernadores de Morena.
En Guanajuato, uno de los principales desafíos será disminuir los crímenes contra los policías, pues desde hace cuatro años encabeza los crímenes contra uniformados, principalmente por el enfrentamiento entre el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y los resquicios del Cártel de Santa Rosa de Lima.
En 2021, 53 uniformados fueron abatidos. Cerca de ahí, en Zacatecas, la violencia repuntó en los últimos meses debido a la disputa de grupos delictivos ligados al CJNG, al Cártel de Sinaloa y al del Noreste.
Sin embargo, para este año, los tres órdenes de gobierno deberán aumentar su presencia a fin de evitar exhibiciones de terror como en noviembre pasado, con el hallazgo de 10 cuerpos colgados de un puente o las constantes incursiones armadas.
Otro punto que requerirá atención es Michoacán, donde han aumentado los enfrentamientos en la zona limítrofe con Jalisco, donde los pobladores han retomado los grupos de autodefensas como solución a los constantes ataques del CJNG.
Uno de los principales desafíos para las autoridades federales y estatales será mantener las zonas turísticas libres de violencia para evitar ahuyentar a los visitantes. En Cancún, el reto es que no se repitan incursiones armadas en las playas a plena luz del día, como ocurrió en noviembre.
En Acapulco, estos grupos pusieron su mira en los choferes de camiones y en las extorsiones a comerciantes.
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