Los primeros minutos de este viernes, Jaime Bonilla Valdez asumió la gubernatura de Baja California en medio de una polémica por la reforma que amplía su mandato de dos a cinco años.
El mandatario estatal se comprometió a acatar las resoluciones que la Suprema Corte tome respecto a los recursos interpuestos en contra de dicha reforma.
Sin embargo, comentó a Catalino Zavala, encargado de tomarle protesta, que si su periodo se queda de cinco años se someterá a la revocación de mandato.
“Ustedes al mes se van a dar cuenta si este gobierno sirve o no sirve”, aseguró, “y les digo otra cosa: si termina en cinco años, yo me voy a someter a la revocación de mandato; el pueblo pone y el pueblo quita”, dijo Bonilla Valdez.
Durante la sesión del Congreso del estado, el gobernador estuvo acompañado por la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, quien se sentó en la Mesa Directiva del Poder Legislativo.
La ministra en retiro dijo que el mandato de cinco años es actualmente legal, no obstante que falta la determinación de la Corte.
Pese a ello, Sánchez Cordero consideró que esta administración será “espectacular”.
La sesión solemne celebrada anoche en la sede del Congreso estatal, fue considerada histórica, pues Bonilla Valdez se convirtió en el primer gobernador de un partido diferente a Acción Nacional, en los últimos 30 años.
En ella, el diputado Catalino Zavala señaló que el morenista será mandatario del 01 de noviembre de 2019 al 31 de octubre de 2024.
Pero todavía falta la última palabra de la Suprema Corte, que en las últimas semanas ha acumulado recursos en contra de un gobierno de cinco años en Baja California.
Incluso ayer el máximo tribunal de justicia del país recibió una acción de inconstitucionalidad promovida por el Instituto Nacional Electoral para invalidar la ampliación de mandato.
(Con información de El Universal y Reforma)
Descubre más desde México Rojo
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.