La justicia de Estados Unidos condenó hoy a cadena perpetua al mexicano Jorge Costilla Sánchez, apodado “El Coss” o “Dos Equis”, quien dirigió el Cártel del Golfo a partir de la detención de Osiel Cárdenas Guillén, en 2003, hasta su arresto en 2012.
El juez Fernando Rodríguez determinó que Costilla encabezó una organización criminal “violenta”, que utilizó armas, intimidaciones y asesinatos para mantener su control sobre una red de tráfico de drogas, de la cual sacó un beneficio personal de 5 millones de dólares. Rodríguez determinó que, además de la cadena perpetua, el ciudadano mexicano deberá pagar estos 5 millones de dólares como gastos del juicio.
En 2017, Costilla se había declarado culpable de los cargos de tráfico de marihuana y cocaína, que le imputaban las agencias de Estados Unidos; según ellas, bajo su liderazgo el Cártel del Golfo introdujo por lo menos 10 toneladas de cocaína y 140 toneladas de marihuana a Estados Unidos.
El capo operó bajo los órdenes de Cárdenas hasta la detención del líder del Cártel del Golfo, en 2003. El capo fue extraditado a Estados Unidos en 2007, y dos años más tarde fue condenado a 25 años de cárcel y a una multa de 50 millones de dólares.
Historial criminal
Creció al lado de Osiel Cárdenas Guillén y desde 2003 estaba al frente del cártel del Golfo, hasta que fue detenido por elementos de la Marina en un operativo en 2012 en Tamaulipas.
Desde finales de 1996, cuando Osiel Cárdenas Guillén asumió la jefatura del cártel, «El señor de la guerra» tenía un lugar definido en la estructura de esa organización criminal. Antes de unirse a la organización criminal era oficial de policía municipal en Matamoros, Tamaulipas.
Fue arrestado en 2012 y a petición de Estados Unidos fue extraditado; el 26 de septiembre de 2017 se declaró culpable. El gobierno estadunidense lo considera responsable de importar más de 10 mil kilos de cocaína y 140 mil kilos de marihuana.
«El Coss» permanecerá bajo custodia a la espera de su transferencia a una instalación de la Oficina de Prisiones de Estados Unidos, que se determinará en un futuro próximo.
A fines de la década de 1990, el Cártel del Golfo reclutó a un grupo de élite de exmilitares mexicanos para unirse a sus filas como agentes de seguridad y ejecutores que se conocieron como Los Zetas. El Cártel del Golfo y Los Zetas operaron bajo el nombre de «La Compañía».
Costilla Sánchez se convirtió en el líder de La Compañía durante varios años después del arresto de Osiel Cárdenas Guillén en 2003 y hasta su arresto en septiembre de 2012.
Durante su asociación en «La Compañía», Costilla Sánchez fue responsable de supervisar todas las operaciones y proporcionar liderazgo que resultó en la importación de miles de kilogramos de cocaína y mariguana a Estados Unidos. Bajo su liderazgo, «La Compañía» controlaba numerosas plazas a lo largo de la frontera de Estados Unidos y México, incluyendo Matamoros, Río Bravo, Reynosa, Miguel Alemán y Nuevo Laredo. Costilla-Sánchez utilizó estos lugares estratégicamente importantes para distribuir cocaína y mariguana.
Con información de Proceso
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