Todo parece indicar que la organización criminal liderada por «El Mencho», en efecto cuenta con una fracción delincuencial pero no aliada, sino disidente
Según información oficial de la Procuraduría General de la República (PGR), todos los cárteles de la droga que operan en México tienen alguna célula delictiva, excepto una: el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Sin embargo, todo parece indicar que la organización criminal liderada por Nemesio Oseguera Cervantes, «El Mencho», en efecto cuenta con una fracción delincuencial pero no aliada, sino disidente. Se trata del Cártel Nueva Plaza.
La existencia de células delictivas en los cárteles de la droga es regularmente señal de debilitamiento, dado a que estas en ocasiones suelen ser enemigas, quienes se disputan el poder de la organización tras la caída de algún capo.
La existencia de esta fracción disidente del CJNG se dio a conocer el pasado 19 de marzo, cuando Javier Salomón Aceves Gastélum, Marco Francisco García Ávalos y Jesús Daniel Díaz García desaparecieron en Tonalá, Jalisco.
Los tres, estudiantes de cine, habrían sido confundidos por miembros del CJNG con sicarios de una banda enemiga, cuando acudieron a una casa para realizar una tarea. Sin embargo, dicho domicilio era aparentemente de Diego Gabriel Mejía, «El Diego», quien era buscado por narcotraficantes de «El Mencho», por ello monitoreaban el lugar esperando a que volviera, pues se encuentra en prisión.
Al ser confundidos, Javier, Marco y Jesús fueron levantados, torturados, asesinados y disueltos en ácido, según la Fiscalía General del Estado de Jalisco, versión que ha causado varias dudas.
La desaparición de los estudiantes de cine conmocionó a todo el país y provocó manifestaciones en varias ciudades, particularmente en tierras jaliscienses. El hecho y la versión de las autoridades sacaron a relucir a la célula que estaría detrás de los crímenes contra los jóvenes de Tonalá: el Cártel Nueva Plaza.
El líder fundador de esta célula es identificado como Carlos Enrique Sánchez Martínez, «El Cholo».
Sánchez Martínez era señalado como un hombre cercano a «El Mencho», desde antes de que el CJNG existiera como un cártel independiente. La ruptura entre «El Mencho» y «El Cholo» viene desde marzo del año pasado, cuando fue asesinado un colombiano operador de Oseguera Cervantes.
El poder criminal del Cártel Nueva Plaza aumentó en diciembre de 2017, cuando Erick Valencia Salazar, «El 85» fue liberado por violaciones al debido proceso. «El 85» fue uno de los fundadores del CJNG hasta 2012, cuando fue capturado en Zapopan, Jalisco.
Tras su liberación, Valencia Salazar se habría unido con el Cártel Nueva Plaza. Juntos, «El Cholo» y «El 85», buscan quitarle el poderío criminal al CJNG, en presunta alianza con el Cártel de Sinaloa.
La cacería contra «El Mencho» que autoridades mexicanas y estadunidenses anunciaron en agosto pasado abrirían la puerta a que el Cártel Nueva Plaza expandiera su mapa criminal. Por ello, Jalisco se ha convertido en un campo de batalla durante este 2018.
De enero a octubre de 2018 fueron asesinadas en Jalisco mil 950 personas, lo que significa un promedio mensual de 195 víctimas, según el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).
Esta cifra, con dos meses para conocer el total de asesinatos de este año, ya supera el número de homicidios dolosos que se registraron en Jalisco el año pasado.
En 2017 fueron asesinadas mil 552 personas en tierras tapatías, lo que significa un promedio de 129 casos mensuales.
Esto significa un aumento en el promedio mensual de 51% en los asesinatos cometidos en Jalisco en menos de un año. Mientras que en los últimos meses, los asesinatos en Jalisco aumentaron un 31%. Esto al pasar de 194 asesinatos en julio a 256 en octubre pasado, siendo esta la cifra de muertos más alta en Jalisco en lo que va de 2018.
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